Montada en una Strato American Custom Shop, las primeras sensaciones son potencia y definición.
Una dosis de potencia para un sonido clásico de Stratocaster, dotandolo de un aumento de la ganancia y potencia en graves.
Ideal para vitaminar el sonido fino y mimado típico de las Stratocaster. Pero si lo que se busca es potenciar ese sonido vintage tan popular, quizás esta no sea la pastilla más recomendable.
Primeramente, la coloque en la posición de puente, consiguiendo unas rítmicas poderosas y más cercanas a un sonido P-90 que al clásico de las single.
Los sonidos limpios, muy correctos y más agresivos que los de las pastillas de serie con la peculiaridad de saturar antes un amplificador a válvulas.
Con sonidos saturados, una excelente elección, y más si lo conjugamos con distorsiones sucias tipo Fuzz, en las que la definición se sigue manteniendo excelente con la combinación de esa sonoridad embarrada.
Tras estas pruebas decidí colocar la pastilla en la posición central de mi Strato. Consiguiendo un extra en el espectro de los graves, y quedando ideal para combinarla con las pastillas simple de mástil y puente gracias al selector de pastillas de cinco posiciones.
Una buena pastilla, a buen precio si lo que se quiere conseguir es dotar de más ganancia y más graves a una Strato. Con el correspondiente contra de que se aleja del sonido clásico y vintage tan característico de las Stratos.
Aún así, ideal para casi todos los estilos, desde un Blues agresivo, Rock and Roll, Pop o incluso Stoner. Sin adquirir la potencia suficiente para hacer el metal más pesado.