Tras probar simulaciones de cabs digitales, esta es la mejor opción, sin lugar a dudas. Tiene mucho hit y alta calidad. Tal vez, podría haberme comprado un modelo inferior, ya que el precio de este es elevado, pero lo vale. Básicamente, con todos los preajustes en el centro, obtenemos un altavoz que bien puede recordarte al Vintage 30. A partir de aquí, cambiar a Bright lo hace más brillante (americano, no es un Jensen, pero suena muy bien), el mellow pasa a recortar agudos y comprimir, entrando más en otros tipos de Celestion. El resto de preajustes te ayudarán a acertar con lo que vas buscando con una calidad de sonido excepcional para grabación. En mi caso, lo compré para que mi réplica del Fender Tweed (5E3) fuera directo al ordenador para grabar y practicar en casa con auriculares. Como caja pasiva, utilicé el Power Attenuator económico de Thoman. Creo que directo a mesa en un concierto irá también a las 1000 maravillas. En cuanto a su construcción, robusto y sólido, pesa y vale la pena con unos tornillos anclarlo al amplificador si vas a tocar en vivo, ahorrándote microfonar e historias raras con técnicos de sonido.