Vale, son unas de las cuerdas más económicas del mercado...Pero no suenan mal!
Hay 3 variables a tener en cuenta:
1- Sonido: Al ser cuerdas de acero, suenan brillantes y modernas. Puede gustarte o no (yo prefiero los sonidos más clásicos y cálidos) pero cumplen a la perfección, ya que no tienen un tono desagradable como otras cuerdas. Además, usándolas un par de meses ya pierden ese brillo molesto y suenan bastante aceptables.
2-Tacto: Es su punto flaco. Son unas cuerdas un poco rudas e incómodas, pero tampoco es que sean intocables. Al poco tiempo te acostumbras y ni te enteras.
3-Durabilidad: He utilizado unos cuantos juegos, y si mi memoria no me falla, nunca he roto ninguna, y eso que slapeo a lo bruto (tirando mucho de las cuerdas).
No puedo decir que haya trampa ni cartón con estas cuerdas tan baratas. En relación calidad/precio son de lo mejor como cuerdas de batalla.