Primeo voy a contar lo que me gusta de esta guitrra, y luego lo que no tanto.
Tiene un sonido muy bueno, muy en plan jazz clásico. El que tenga solo una pastilla, de graves, para mí es una ventaja, porque solo uso las pastillas de graves, así que prefiero que solo tenga esta, para no pagar pastillas que no uso. Y el sonido que se logra con ella es muy bueno. También el sonido sin enchufar es bueno, aunque me gusta más enchufada.
El tacto de las cuerdas es muy cómodo, y no están nada altas. Están duras, no se pueden hacer bendings, pero sí se puede tocar muy rápido y preciso.
Sobre la estética, me gusta, y es original, porque es de las pocas guitarras de jazz que vienen con la madera al natural.
Los acabados, perfectos. No he visto nada mal en toda la guitarra.
Pero lo que no me ha gustado es el puente. No viene fijado a la caja, y viene con una tela debajo que hay que quitar… y sin instrucciones detalladas de cómo hacerlo. Así que al quitarlo, se me movió el puente totalmente, desajustando así la guitarra. Es un buen puente, de madera, que contribuye a que suene así de bien la guitarra, pero no me gusta que no esté fijado. Igual no hay problema con ello, pero no me gusta.
Y la otra cosa que no me gusta es el tamaño. Pero eso no es un fallo de esta guitarra, es que las guitarras de jazz de caja grande son así. Pero el caso es que me resulta difícil acoplarme a ella. El mástil me resulta cómodo, pero la caja no tanto.