Hace poco compré una Gibson Les Paul Standard, y me quedé con las ganas de una guitarra con P90 o una Telecaster.
No quería gastar mucho, así que decidí irme primero a por una Epiphone Les Paul Special, con p90 y mástil años 50. Hubiese preferido una Gibson, pero a veces hay que ir poco a poco. Aunque le Epiphone me sorprendió mucho y para bien. El acabado está casi perfecto, un ligero defecto en la trasera de la pala, pero nada grave. El sonido que tiene me gustó mucho, y pienso que puede ser una excelente guitarra con algún ligero cambio (ya lo es tal cual viene). La afinación aguanta perfectamente y las pastillas suenan muy bien, aunque tal vez en un futuro las cambie junto con el puente. A parte de todo esto, es lo que la necesitaba, y con unas P90 Gibson o Seymour Duncan y un mejor punte de aluminio iría genial. Añade el estuche y te vas a unos 700 €. Sigue estando a mitad de precio que una Gibson, cada uno valorará lo que necesita, pero esta guitarra no tiene casi nada que envidiar a una Gibson de gama baja, aunque cueste creerlo.
El mástil me ha gustado mucho, tengo unas manos medianas, y me resulta muy cómodo para tocar. Es grueso, así que si tienes manos pequeñas intenta probarla antes.
Por último su peso, con 3,6 kg. viene a pesar más o menos lo mismo que muchas Stratos y Telecaster.