Llevo ya unos meses con la X-Touch Mini y, sinceramente, no sé cómo me apañaba antes sin ella. Es tan compacta que cabe en cualquier rincón del escritorio, pero no te dejes engañar por el tamaño: tiene potencia de sobra para controlar todo lo que se te ocurra en tu DAW.
Lo que más me mola es lo fácil que es mapear los controles. En un par de minutos ya la tienes lista para manejar volúmenes, efectos, o lo que quieras. Los botones y perillas responden rápido, y aunque no es un tanque, la construcción es bastante sólida para el precio que tiene.
La uso sobre todo con Ableton y FL Studio, y va como la seda. Además, como pesa poco, me la llevo a ensayos y directos sin miedo. Eso sí, el cable USB podría ser un pelín más largo, pero nada grave.