Después de haber comprado, modificado y probado varios modelos de guitarras de viaje, por diversas razones, me quedo con este modelo. Lo que necesito es tener la guitarra pegada a mí en trayectos largos y espacios muertos.
Pros: es muy usable... sus proporciones, diseño y características hacen que te adaptes fácilmente a tocar con ella colgada (recomiendo usarla con cinta, es un poco pequeña para colocarla a la manera tradicional sobre el muslo). El brazo derecho se adapta fácil a la posición clásica.
Contras: la electrónica que monta funciona bien, aunque para trabajar con audífonos, se echa de menos un poco más de potencia. En cuanto al piezoeléctrico, he tenido que hacer un poco de bricolaje para equilibrar las presiones de los agudos y los graves sobre el puente. Van mejor cuerdas de tensión alta, por lo que disponer de alma es una ventaja ante posibles desviaciones del mástil. Otra cosa que podría rediseñarse, es el peso. Al ser de caja maciza, resulta un poco pesada para ser una Travel Guitar que, aunque no es excesivo, si metemos una tablet y algún accesorio más en el estuche (que es muy cómodo, práctico y fácil de portar), el conjunto puede llegar, como en mi caso, a los 4,8 kg.
En resumen: Una muy buena opción para guitarristas clásicos que quieran aprovechar cualquier momento para estudiar, a un precio muy razonable.