La verdad es que son cucos, porque ofrecen una luz agradable, y sus programas son graciosos, con fades, pudiendo elegir un amplio abanico de colores, etc... pero tiene varios fallos para mi gusto bastante graves.
1- Poca intensidad. La luz que manda apenas sirve para decorar un mueble de tu cuarto. Es muy ténue. La tenemos en un puente de luces y es más decorativo por el toque de color que por su efectividad a la hora de iluminar.
2- El mando y el foco pocas veces se entienden. Le das 20.000 veces a que cambie de programa o color y nada, pasa. Al final acabas desesperado pasando.
3- A veces los focos no encienden, los tienes que desenchufar y volver a enchufarlos hasta que le da la gana encender.
Pedí dos, y los dos funcionan de la misma manera, así que imagino que es fallo de fabricación, y no de que he tenido mala suerte.
NO los recomiendo para uso profesional, si bien para tu cuarto, o para cualquier patochada donde no haya demasiada responsabilidad, sí pueden servir.