Como violinista profesional, he buscado un sonido potente y brillante para mi instrumento durante años, y una de las opciones con las me he encontrado has sido estas cuerdas.
Se trata de un juego de cuerdas sintéticas, con un sonido intenso y muy brillante, que resultan muy apropiadas para interpretar música romantica y contemporánea.
Dentro del juego, en general bastante equilibrado, me quedo con las dos graves ("sol" y "re"), por su gran riqueza en armónicos y rango de dinámicas; la cuerda "la" no permite tantas dinámicas, y la cuerda "mi" suena muy nítida y brillante, aunque compensada con la segunda.
Finalmente, se trata de un juego muy duradero, que soporta bien cambios de temperatura, y que se estabiliza al poco tiempo de haber cambiado las cuerdas obteniendo desde un primer momento el mismo sonido que tendremos semanas después.