10. El clarinete

Aunque el clarinete, en comparación con el saxofón, es a menudo considerado como el representante más conservador de la sección de vientos, es de hecho un instrumento de caña muy versátil, y se utiliza tanto en música de cámara como orquestal. Fue el favorito de Mozart, y como el saxofón, ha visto nacer a muchos músicos de jazz de la talla de Sidney Bechet y Benny Goodman. Las dos formas más comunes de digitación son el sistema alemán (Oehler) y el francés (Boehm). Los clarinetes más baratos están hechos de plástico y son generalmente la mejor opción para los principiantes los modelos más caros están hechos de maderas como el ébano, y son adecuados para una interpretación más exigente.

clarinets

La técnica de digitación alemana que guía a la flauta dulce barroca es relativamente compleja. El sistema Boehm evita algunas pulsaciones de palanca, de modo que es más fácil el aprendizaje para el principiante. Optar por una u otra opción debe ser contrastado con el profesor de música antes de la compra de un instrumento. Fundamentalmente podemos decir: Dentro de la música no clásica como Dixieland, Klezmer y Jazz, se ha impuesto el sistema Boehm. Esto se debe en primera línea que los estilos de modulación intensiva como por ejemplo el Jazz (muchos cambios tonales) se dominan algo mejor con un clarinete de sistema Boehm que con uno de sistema alemán. Con ello se posibilita también un toque más rápido en pasajes musicales complejo.
Además de las diferencias en la digitación, los clarinetes Boehm trabajan con una boquilla con una abertura algo más abierta y una caña algo más ancha. El resultado de esto es que el sonido es más flexible, rico en armónicos y más imponente. El sonido del clarinete alemán es algo mas limpio y cálido.

Como instrumento para principiantes podemos destacar que es a la vez más silencioso y menos costoso que el saxofón, y aunque la digitación es un poco más compleja, es más fácil producir un sonido básico con él. También es más ligero y portátil, ya que el instrumento se separa en cinco secciones más pequeñas para poder transportarlo. Al igual que con el saxofón, hay cañas especiales para el clarinete. También necesitarás grasa de corcho para las piezas de conexión.

La edad ideal para iniciarse se encuentra entre los 8 y los 10 años. Al igual que con todos los instrumentos de viento madera son ventajas los dientes definitivos y unos dedos suficientemente largos para alcanzar todos los agujeros. El precio de un clarinete en condiciones comienza en un rango de entre 600-1000 euros. Las tonalidades más populares son Sib y La.

En nuestra guía online sobre clarinetes encontraréis mucha más información interesante acerca de estos instrumentos.

Sus personas de contacto