Custom In-Ear Systems

Cualquiera que sea la calidad de los componentes de audio utilizados, la calidad de sonido que realmente llega a los oídos de los usuarios de un sistema In-Ear, puede variar mucho de una persona a otra, simplemente porque todos tenemos formas de oreja diferentes. Todas las frecuencias se ven afectadas de maneras distintas, del mismo modo que un auricular encaja dentro de la oreja. Las frecuencias bajas son subjetivamente amplificadas por contacto directo, mientras que las frecuencias altas tienden a ser amortiguadas -intenta menear un par de auriculares estándar de iPod a tu alrededor, para experimentar esto.

Al igual que con la protección auditiva, la mejor solución son los moldes a medida. La parte externa de cada auricular está moldeado a partir de una impresión del oído del cliente, lo que garantiza una transmisión óptima de todas las frecuencias, siempre que el diseño básico sea correcto, y también hace que el auricular resultante encaje muy bien, y sea mucho menos probable que se caiga.

Los sistemas hechos a medida son caros, en parte por el costo de tomar una impresión de la cavidad de la oreja del cliente, y la producción de moldes individuales, y en parte porque no tendría mucho sentido hacer esto si el propio auricular no fuera de la más alta calidad.

En el extremo más alto del mercado, estos sistemas pueden ser fabricados a medida para adaptarse a las necesidades del cliente en todos los aspectos. Además de que se amoldan a los oídos del usuario, el número de drivers (uno, dos o incluso tres) pueden ser especificados, así como el grado de rechazo al ruido externo, amortiguación e incluso color. Empresas estadounidenses como Ultimate Ears y Future Sonic son los líderes en este campo.