Un micrófono dinámico es un transductor electroacústico cuya función es convertir las ondas sonoras acústicas de la forma más fiel al natural posible en vibraciones mecánicas y luego en ondas eléctricas. El funcionamiento de un micrófono dinámico se basa en el principio de inducción: según este, se induce un voltaje en un conductor eléctrico que se mueve en un campo magnético. Este conductor puede ser al tiempo la membrana del micrófono (micrófono de cinta) o puede estar fijado como una bobina móvil a la misma membrana (micrófono de bobina móvil).
La membrana de un micrófono de cinta es una tira de aluminio de unos 2-4 mm de espesor y algunos centímetros de longitud. Esta pequeña tira se encuentra fijada entre los dos polos de un imán, de manera que solo puede oscilar unos pocos µm. Dado que la resistencia de la cinta es inferior a 1 Ohm, se le conecta un transmisor que transforma la resistencia de salida a aprox. 200 Ohm. Los micrófonos de cinta generalmente tienen una respuesta en frecuencia lineal. Además, la membrana muy ligera tiene un comportamiento de impulso muy bueno. El micrófono de cinta puede competir definitivamente con el micrófono de condensador, y puede superarlo incluso en términos de relación precio/prestaciones. Reacciona con sensibilidad al viento, las vibraciones y los movimientos rápidos.
En los micrófonos de bobina móvil, a la bobina de voz unida a la membrana se le acopla una sección en forma de anillo del imán. Cuando la membrana oscila, se le induce un voltaje que se puede conectar directamente sin un transductor, porque la resistencia de la bobina móvil generalmente ya es de 200 ohmios. Complicadas son todas las medidas para mantener una respuesta en frecuencia lineal en todo el rango de transmisión. En comparación con un micrófono de condensador o un micrófono de cinta, el micrófono de bobina móvil no ofrece una respuesta en frecuencia lineal. También el comportamiento de impulso, debido a la relativamente alta masa de la membrana, no es óptimo. A pesar de estas imitaciones, los micrófonos de bobina móvil de alta gama ofrecen una buena calidad de sonido y son también empleados frecuentemente en los estudios. No obstante sobre el escenario los encontrarás todavía con más frecuencia. Porque son más robustos que los micrófonos de condensador y trabajan sin distorsión incluso en niveles altos de presión sonora. Dado que de todos modos no se puede lograr una respuesta en frecuencia lineal con un micrófono de bobina móvil, muchos fabricantes intentan al menos influir en la respuesta en frecuencia de manera que un micrófono sea especialmente adecuado para un tipo de aplicación en particular. Un destacado micrófono vocal es, por ejemplo, el SM 58 (Shure).