Utilizo el teclado como controlador MIDI para mi DAW, aunque a veces también para ensayar con mi grupo, y he encontrado el teclado del Nektar Impact GX 61 un tanto torpe al tocarlo. Es muy "de plástico", poco creíble, ya no porque no sea contrapesado, que no lo es, sino que las sensaciones no son buenas en la respuesta al tocarlo.
Es lo peor, porque por lo demás está muy bien, pero a mí no me compensa. Las sensaciones al tocar un teclado deben ser buenas, o al menos aceptables, más allá de sus posibilidades como controlador, en las que cumple de sobra.