Funciona muy bien para apagar reflexiones si se utiliza plisada, cubriendo un metro o metro y poco de pared por cada dos metros de cortina.
Es muy útil, por ejemplo, para cambiar la sonoridad en una sala de tomas, recogiéndolas para que sea más viva y extendiéndolas para que sea mas seca.
Es muy pesada; hace falta una barra bien sólida para colgarla.