Compré 6 de estos soportes para poder sonorizar una banda completa (yo ya tenía otros 7 pies de otras marcas) sin dejarme medio sueldo.
Estos pies de micro cumplen su función si no se van a manipular mucho. Es decir, para microfonear instrumentos, por ejemplo. Porque si se le pone a un cantante que lo va a estar zarandeando, seguramente se rompa, o al menos ésa es la impresión que me dan. Además del precio, se agradece que sean tan ligeros, para cargar con todos de un lado para otro. Pero no tienen pinta de aguantar micros muy pesados. De momento, yo he hecho un bolo con ellos, y han aguantado, pero sólo para instrumentación; a los cantantes les he puesto los Adam Hall.
En resumen, unos soportes muy económicos que no están mal para salir de un apuro, pero que no considero para uso profesional.