Ya tenia un cry-baby, el de toda la vida, y tanto que lleva 15 años conmigo aunque es un modelo muy parecido al original, si no igual.
Nunca he tenido ningún problema con él, por ello no me plantee cambiar de marca: como mucho un poco de ruido cuando lleva mucho tiempo sin usarse, que se quita en una sola sesión dandole un poco de caña.
Si buscaba posibilidades de regulación para añadirlo a otro set de pedalera pero sin tener que hacer cambios en su interior, que en cry baby solo se reducen a variar el recorrido de variación de tono (sin entrar a considerar cosas mas raras)
Este modelo permite llevarlo al terreno que queramos en cada momento, variar los limites máximo y minimo y mucho mas de lo que esperaba, todo con controles que tiene en su exterior.
Es decir tenemos el mismo sonido y fiabilidad de construcción pero con parámetros regulables.
Creo que con un poco de dedicación en los ajustes puede emular cualquier sonido de los modelos de "signatura" como el Slash sin ir mas lejos -que cuesta algo mas- o los de otras marcas.
Por eso lo considero el todo-en-uno, pero siendo el de siempre.
Una actualización perfecta: el pasado y el presente en un solo wah-wah y la construcción sigue siendo tan rígida y primitiva como el de hace 15 años, cosa que no es tan habitual.