Salta a la vista que es una púa preciosa y que la idea del control de dureza es buena, pero...
- Depende de cómo ataques la cuerda, le das con el plástico blando y es una molestia.
- A fuerza de usarla, se rompe la unión entre las dos piezas de las que está compuesta.
- Acabas usando sólo dos durezas: la dura y la blanda. La gama de grises te la pierdes.
Aún así, es una púa que para fardar es la hostia. Además, se ven genial en la oscuridad. (Ahora en serio, en realidad son cómodas, pero seamos claros: es una púa).