13 desgracias de escenario: cuando la mala suerte te persigue

Los músicos lo saben: el escenario es un mundo lleno de peligros. Y la mala suerte siempre está al acecho. Hemos preparado una lista con las 13 peores cosas que pueden pasarte sobre un escenario.   

1 – La correa de la guitarra/bajo se suelta

Estás en pleno solo, intentas imitar al legendario Angus pasándote la guitarra por la espalda y drama al canto: la guitarra sale disparada porque la correa se ha soltado. Tu ego ahora se ha empequeñecido y tu guitarra se ha llevado un buen golpe. Va siendo hora de que te presente a mis amigas las Strap Locks  ¿las conoces?

2 – Te equivocas de canción

El batería marca el tempo, 1, 2, 3, 4 y todo el mundo empieza a tocar a la vez. Emocionado (y un poco flipado) te lanzas a tocar el primer powerchord a toda castaña. Algo no encaja, miras el setlist y todavía cuadra menos; demasiado tarde, todas las miradas están sobre ti, la has cagado. La próxima vez un atril podría sacarte de un apuro.

3 – Ojo: cuidado con los caídas

¡Nunca subestimes una ensalada de cables! Una verdadera trampa para músicos, no hay que tomárselo a la ligera. Para evitar acrobacias te aconsejamos unas bridas para cables o los maravillosos sistemas inalámbricos.  Para los más previsores existen cables multicores y puentes de paso.

4 – Recuerda: tu sistema inalámbrico funciona a pilas

Si estás acostumbrado a tocar durante horas piensa en las pilas de los emisores y receptores de tu sistema inalámbrico (seguro que incluyen un indicador para saber el nivel de batería). Y evidentemente con unas pilas recargables ahorrarás tiempo y dinero.  Prepárate antes de subir a escena.

5 – Un clásico : Rompes cuerda, rajas parche

Tocas 365 días al año en casa y no has roto cuerda o parche en meses; pisas el escenario y empiezan a saltar cuerdas. Nadie te echó mal de ojo amigo, es la ley de Murphy.  Mientras tengas repuesto el público será indulgente con tu mala suerte.

6 – Tu cable falla, y tú también

No hay nada más molesto que los indeseables ruidos de un micro afectado por el viento o un cable con perdidas de señal. Ya se sabe que las desgracias vienen juntas, y un cortocircuito en un cable de mala calidad puede afectar a su amplificador. Un cable de calidad evitará que te encuentres con este problema cada dos meses. Y un tester de cables evitará que vayas paseando cables en mal estado de aquí para allá.

7 – Una ráfaga de viento y a la porra con todo

Las partituras y en general, cualquier folio, no se lleva muy bien con los directos: aire libre, el ventilador del batería, el aire acondicionado, en resumen, un montón de factores para que salgan volando. Para evitar este tipo de sustos existen unos soportes de folios para poder pasar página sobre atriles. Aunque queridos amigos, estamos en el 2017, hay que empezar a gastar menos papel, utiliza una tablet y ayúdate de este pedal bluetooth pensado para pasar página con el pie.

8 – ¿Sí, dígame?

Vivimos en un mundo ultraconectado, smartphone en mano siempre pendiente de las notificaciones y los fans. Un consejo muy útil para cada concierto: apágalo o déjalo en el backstage: evitarás interferencias cuando tu madre te llame en medio de un concierto.

9 – Está todo encendido pero no suena nada

No entiendes nada: todo iba de maravilla en el local de ensayo y ahora ni siquiera suenas. No sabes que pasa,está todo enchufado igual que en el local. Hello darkness my old friend…  Marca tus cables con etiquetas o anillos de colores, te ayudará a encontrarlos facilmente. Sino una linterna puede salvarte la vida en un escenario mal iluminado.

10 – La cerveza siempre en un sitio seguro

Shit happens: un mal gesto, una cerveza mal colocada, un movimiento brusco y adios pedalera, liada al canto. De toda vida liquido y electricidad son un matrimonio explosivo. Aunque tampoco hay que ser extremista, esto no debe ser excusa para no hidratarse durante el show. Por suerte este porta-bebidas es la solución: fíjalo sobre cualquier pie de micro o de platos y voila.

11 – Improvisa, adáptate, supérate

No todas los pies y pinzas de micro tienen el mismo calibre. Normalmente encontramos adaptadores directamente sobre el pie de micro, pero no siempre es así. ¿Quién no se ha visto con dos objetos incompatibles en las manos y ha pensado que diablos hago yo con esto? Comprobar todo antes de salir de casa puede ayudarnos a evitar estos pequeños pero estúpidos problemas. Y si aún así te pilla el toro, el método cinta americana nunca falla.

12 – La voz se rompe

Después de horas de ensayo pendiente de dar lo mejor de ti mismo, sales a escena y después de tres canciones tus cuerdas vocales piden paz y sacan la bandera de la rendición. Fin del show, buenas noches. Por mucho que quieras prevenir (ya sabes, evitar tabaco, alcohol, etc) a veces no es suficiente, y siempre puedes darle una pequeña ayudita a tu voz con estos aceites esenciales naturales pensados para cantantes.

13 – Víctima del mal tiempo

Las cancelaciones de conciertos al aire libre son algo más habitual de lo que podemos pensar. Es el peor de los enemigos, no hay previsión ni solución que valga. Solo podemos ofrecerte un paraguas, pero ojo… ¡no lo abras a techo cubierto!  ?

Juanma vive en Barcelona y se pasa el día inmerso en el mundo de la música entre ensayos, grabaciones y conciertos.

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